Despedirse tras un rollo suele ser un momento comprometido por dos razones. A veces no se tiene claro qué hacer con el futuro de esa relación y también es posible dudar a la hora de cómo comunicar las intenciones. Por eso, vale la pena contar con algunas estrategias.
Despedirse tras un rollo, si no tienes las cosas claras, puede convertirse en todo un lío. Y no queremos que te sientas confundido a la hora de cerrar o continuar una relación que, en principio, debería haberte hecho sentir bien.
Sentir bien al menos durante una noche, que es el plazo que, por definición, duran estos rollos. Luego ya podemos ver si, en virtud de diversos factores, este rollo tiene continuidad y se convierte en algo más o se queda simplemente en lo que fue.
Hay, por otro lado, tanto tipos de rollos de una noche como parejas existen. Las combinaciones de sentimientos por los que se juntan dos personas para una noche son casi infinitas. Entre ellas destacamos por placer, curiosidad, borrachera, despecho, desesperación, etc.
Como no puede ser de otra manera, respetamos todas las razones para liarse y acostarse una noche, siempre que los protagonistas lo pasen bien.
¿Qué decir o hacer para despedirte?
Eso sí, cuando acaba la noche en cuestión y te despiertas junto a la otra persona, es posible que te estés preguntando qué has hecho. Igual que también puede ser que te encuentres tan eufórico que solo pienses en cómo gestionar la situación para que el encanto de la primera vez tenga continuidad.
Así que no es ninguna locura tener estrategias preparadas para cualquiera de estos casos. De esta manera, vas a poder salir airoso de cualquier situación, por comprometida que te parezca.
En primer lugar, has de apostar por las despedidas elegantes. Tanto si estás excitado como si te encuentras decepcionado, nunca olvides que la persona con la que te has acostado tiene, igual que tú, sentimientos. Por lo tanto, tratarla con empatía es una obligación.
Si las cosas han salido bien, esa despedida va a resultar más sencilla, ya que puedes emplazar a tu pareja para volver a veros. No hace falta quedar en nada concreto todavía sobre la próxima cita, pues daría una impresión demasiado meticulosa.
Siempre es bonito, en este sentido, referirse a lo bien que ha estado la experiencia o alguna anécdota graciosa que quede como símbolo de esa primera noche.
Pero también se dan casos menos felices. Tras esa primera noche, algo no ha sucedido como esperabas al principio. Quizá no te sientas seguro respecto a cómo comunicar que no habrá una segunda vez.
Para estas situaciones, el mensaje de texto es una buena alternativa (también lo es para complementar las despedidas felices). Puedes utilizarlo para despedirte con clase y agradecimiento, pero también, si te pregunta por un próximo encuentro, con franqueza. Es importante no dar falsas esperanzas.
En definitiva, despedirse tras un rollo requiere guardar las formas y no engañar, por lo que te recomendamos no improvisar. ¡Disfruta de tus citas hasta la despedida!