Repasamos cuáles son los consejos más eficaces para establecer unos límites saludables que te permitan conservar tu espacio personal durante una relación. No dudes en poner en práctica nuestras recomendaciones para mantener tu equilibrio emocional.
A la hora de hablar de límites saludables en una relación de pareja es posible que pienses que esta decisión no es la más acertada ya que es más adecuado darse por entero para que todo vaya bien. Sin embargo, ese esfuerzo provoca que no puedas mantener tu espacio emocional lo que, más temprano que tarde, terminará pasándote factura.
¿Cuáles son las señales de alerta que debes tener en cuenta?
Pueden ser múltiples y siempre estarán marcadas por las circunstancias de cada pareja. Te las resumimos en el siguiente listado.
· Existe una batalla constante por conseguir el poder de la pareja.
· Hay faltas de respeto hacia la actitud, aficiones o amistades de la otra persona.
· Has dejado atrás tu verdadera personalidad para amoldarte a los gustos de tu pareja.
· La otra persona, o tú, consideran que hay que realizar cambios en la personalidad para ajustarse mejor a los gustos o actitudes que se exigen.
· El control y los celos.
· Comparaciones constantes con otras personas.
· Discusiones por cualquier cosa.
· Sentirse en un círculo vicioso del que parece imposible salir.
Consejos para establecer unos límites saludables
Debes tener en cuenta que establecerlos te ayudará a evitar ser víctima de chantajes, a confirmar tu personalidad, a mantener tu propio espacio y, sobre todo, a mantener una relación mucho más sana donde tu autoestima sea la protagonista. Nuestras propuestas para que establezcas los límites que necesitas son las siguientes:
· Aclarar los términos y las consecuencias. Cuando se pone un límite es para que se respete. Aunque sea adecuado mantener cierta flexibilidad, la otra persona ha de saber que si se sobrepasa el límite la relación se verá dañada.
· Ser coherente. Los límites han de ser respetados, tanto los tuyos como los de tu compañero o compañera. Además, cuando se comenta la necesidad de fijar algún límite es necesario aclarar por qué y comportarse de forma razonable.
· No permitas ni la crítica, ni la burla sistemática. No hablamos de que falte el sentido del humor en la relación, pero sí de que las burlas y las críticas que se te hacen en público tengan su lógica consecuencia.
· Si no te respetas tú, no se va a respetar nadie. Marca bien tu espacio, no te dejes avasallar y deja bien claras tus necesidades.
· Practica el desapego. Tener una relación duradera con alguien no significa que tengas que comulgar con ruedas de molino. Decir no es sinónimo de quererte y de protegerte ante lo que no es lógico o puede dañarte.
Conocer a tu pareja y marcarle unos límites saludables pueden ser las dos medidas más eficaces para mejorar tu relación de forma progresiva. El esfuerzo merece la pena. Decirle adiós a la tristeza y a la incomprensión te permitirá comenzar una nueva etapa sentimental. ¡Lánzate con estos consejos!